(Miércoles 18/10/2023).- El eje Moscú-PekÃn sincroniza de nuevo sus relojes en un momento de múltiples incendios globales. El presidente ruso, VladÃmir Putin, tiene previsto aterrizar este martes en PekÃn, donde se verá con su homólogo Chino, Xi Jinping. La cita fue programada hace meses, con motivo del foro internacional que marca el 10º aniversario sobre la Nueva Ruta de la Seda, el megaprograma de infraestructuras con el que el gigante asiático busca conectarse al mundo.
El encuentro entre ambos mandatarios, que se espera el miércoles, llega en un momento crÃtico, con el estallido de una nueva guerra entre Israel y Gaza que amenaza con abrir una nueva brecha en la escena geopolÃtica y se suma a la ofensiva de Rusia en Ucrania.
Desde que Putin decretó la invasión a gran escala de la exrepública soviética, no es frecuente ver al lÃder ruso de viaje en el extranjero. En marzo, el Tribunal Penal Internacional emitió una orden de arresto contra él por presuntos crÃmenes de guerra por su implicación en la “deportación ilegal de niños†ucranios.
Al mandatario le quedan pocos sitios a los que acudir sin correr el riesgo de ser detenido. En su primer viaje fuera de Rusia desde entonces, Putin visitó el jueves pasado Kirguistán, nación que no reconoce al citado tribunal, como tampoco lo hace China.
El viaje será una nueva toma de contacto entre dos lÃderes que se hacen llamar “viejos amigos†y que han llevado las relaciones entre sus Estados al punto más álgido de la historia reciente, a pesar de la guerra y, en parte, impulsada por ella. Putin y Xi se han reunido ya más de 40 veces, sellaron unas semanas antes de la invasión rusa de Ucrania una “amistad sin lÃmites†y en su último encuentro en Moscú, en marzo, Xi se despidió de su homólogo ruso con una confidencia.
“Se están produciendo cambios que no han ocurrido en 100 años. Cuando estamos juntos, pilotamos esos cambiosâ€. A lo que Putin respondió: “Estoy de acuerdoâ€.
Mientras los paÃses del G-7 y sus aliados han decretado sanciones contra Moscú y segado sus lazos económicos, la guerra en Ucrania ha dado un nuevo impulso al comercio con PekÃn: en 2022 aumentó un 34,3%, hasta alcanzar los 190.000 millones de dólares (unos 180.230 millones de euros).
Occidente recela de la calculada equidistancia escorada hacia Rusia que mantiene China en la guerra de Ucrania: PekÃn en ningún momento ha condenado la invasión, aunque se ha propuesto como mediadora con un documento con 12 puntos para encontrar una “solución polÃtica†a la “crisis†y un enviado especial designado directamente por Xi para sondear un posible acercamiento. Su interlocución, hasta la fecha, no ha dado ningún resultado.
El ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, ha pasado el lunes por PekÃn a modo de avanzadilla. Durante una reunión con su homólogo chino, Wang Yi, han discutido los dos grandes puntos de fricción de la escena geopolÃtica: Ucrania y la guerra entre Israel y Gaza. Sobre este último punto, Wang ha reiterado la condena de China a todas las acciones que dañen a los civiles y violen el derecho internacional, y ha hecho un llamamiento a que el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas tome medidas.
“Las grandes potencias deben desempeñar un papel activo†para lograr un alto el fuego, establecer canales de ayuda humanitaria de emergencia y evitar mayores desastres humanitarios, ha dicho Wang, según la lectura oficial recogida por la agencia china Xinhua. También ha insistido, tal y como ha repetido PekÃn en los últimos dÃas, que se ha de “activar cuanto antes la solución de dos Estadosâ€, y establecer una hoja de ruta para el “restablecimiento de los derechos legÃtimos de la nación palestinaâ€.
Ambos “hicieron referencia a la crisis de Ucrania, incluyendo los esfuerzos para resolverla por medios diplomáticosâ€, asegura el comunicado oficial ruso, según recoge la agencia TASS, y â€destacaron la importancia de impulsar una estrecha coordinación entre Rusia y China en la escena internacionalâ€, lo cual incluye un buen número de foros: del Consejo de Seguridad de la ONU a los BRICS pasando por el G-20. Ambas partes “se alegraron de constatar que sus posiciones coincidÃan plenamente o estaban muy alineadas en todos los temas discutidosâ€, según el comunicado ruso.
El encuentro con Xi quedará parcialmente opacado por los fastos del tercer Foro de la Franja y Ruta para la Cooperación Internacional —nombre oficial del evento—, en el que participan delegaciones de más de 140 paÃses y que mantendrá prácticamente bloqueada la capital del paÃs durante la semana. China le da una importancia máxima a la cumbre: la Nueva Ruta de la Seda es una de las iniciativas estrella lanzadas en la última década por el mandatario chino, con la que aspira a incrementar la presencia de la potencia asiática en el globo.
La cita contará con jefes de Estado y de Gobierno de numerosos paÃses, con buena representación de Ãfrica y Latinoamérica, pero no se espera la presencia de prácticamente ningún lÃder relevante de naciones occidentales. El mandatario de la Unión Europea de mayor nivel será el húngaro VÃktor Orbán.
Unión Económica Euroasiática
Uno de los objetivos de Moscú será el de “armonizar†la iniciativa china con la Unión Económica Euroasiática, un proyecto de integración auspiciado por Moscú con otras exrepúblicas soviéticas. El lÃder ruso tiene previsto, además de la entrevista con Xi el miércoles, varias reuniones bilaterales con los dirigentes de los Estados participantes en el foro, según un comunicado del Kremlin.
En una entrevista concedida a China Media Group antes del viaje, Putin ha destacado la importancia “fundamental†de las relaciones entre ambos paÃses “para garantizar la estabilidad en el mundoâ€, según la transcripción oficial del Kremlin. En ella no hay ninguna referencia a la guerra desatada hace 10 dÃas en Oriente Próximo. Pero sà contiene una extensa reflexión sobre la situación en Ucrania y el rol de China como mediador.
“Estamos agradecidos a nuestros amigos chinos por intentar pensar en formas de poner fin a esta crisisâ€, dice Putin, que a continuación culpa a Kiev de la imposibilidad de avanzar hacia un alto el fuego y a los paÃses occidentales y el expansionismo de la OTAN de haber provocado el conflicto, como ha hecho de forma habitual. Las propuestas de PekÃn “son absolutamente realistas†y “podrÃan sentar las bases de acuerdos de pazâ€, concede el lÃder ruso. “Pero, desgraciadamente, la parte contraria no quiere entablar ninguna negociaciónâ€.
En la entrevista, Putin hace un alegato en favor del “mundo multipolar†frente a los “vestigios del pensamiento colonial†que representa, según su visión, el orden internacional liderado por Estados Unidos. “Esto es exactamente por lo que luchamos, y esta es la base de nuestra interacción con China en la escena internacionalâ€, concluye.
Fuente: El PaÃs