Apurímac 27/05/2025.- Un nuevo documento reveló que fue la propia presidenta de la República, Dina Boluarte, a través de su despacho, quien inició el trámite para duplicar su sueldo de 16 mil nuevos soles a más de 35 mil. 

El documento oficial, revelado por Panorama, tiene como fecha el 10 de febrero de este año, está firmado por el subsecretario general del Despacho Presidencial, confirma que la solicitud para "valorización de puesto" partió directamente de Palacio, y no del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) ni de la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM).

Esta revelación desmonta la versión difundida por los miembros del Gabinete Ministerial, quienes en bloque negaron que Boluarte hubiera pedido el aumento. La ministra de Cultura, Leslie Urteaga, aseguró en televisión que todo respondía a un informe técnico del MEF y a la implementación de la Ley Servir. Sin embargo, el oficio presidencial demuestra que fue una iniciativa impulsada desde la cima del poder.

Tras darse a conocer el intento de aumento de sueldo, la PCM clasificó el expediente como "confidencial" y se negó a entregarlo al programa Panorama. Con ese sello se pretendía ocultar la cadena de oficios que conducían directamente hacia la jefa de Estado.

Esto evidenció la voluntad de blindar a la presidenta. La confidencialidad no protegía datos sensibles relacionados a la seguridad nacional, sino al prestigio político de una mandataria que pretende duplicar su sueldo en medio de una crisis de inseguridad ciudadana y de cifras de desaprobación históricas.

Fuentes palaciegas relataron que la primicia no le cayó nada bien a Boluarte. Era de noche, y la presidenta veía la televisión cuando entró Carmen Giordano, asesora y amiga de la presidenta. Giordano le dio la mala noticia, el aumento de sueldo acababa de difundirse y el país lo sabía. 

Dina Boluarte entonces estalló en cólera. Se relata que la reacción fue tanta que pidieron agua de azar para calmarla. Personal de Palacio le alcanzó una infusión, pero la mandataria la dejó caer al suelo.

A gritos, Boluarte exigió que se inicie con el rastreo digital de todos los funcionarios que tenían acceso a los papeles. Además, pidió que empezaran a llover los despidos en la PCM y en el MEF. Al día siguiente, ante la prensa, Boluarte no logró contener su molestia y declaró que “le habían hecho la vida cuadritos”, confirmando públicamente la tensión que reinaba en Palacio.

Fuente: La República