Apurímac.- Las niñas y adolescentes de la región Ica continúan siendo desprotegidas. Solo entre enero y agosto del 2024 se han registrado más de 500 denuncias de violencia sexual contras las menores de edad, quienes han sufrido actos contra el pudor, tocamientos indebidos, acoso sexual, violación sexual y otros.
Siguen desprotegidas
La violencia sexual contra ellas no discrimina clases sociales, niveles socioeducativos y tiene un impacto devastador en las víctimas. Según el portal estadístico del Programa Nacional Aurora del Ministerio de La Mujer y Poblaciones Vulnerables, en los ocho primeros meses del año actual, se registran un total de 551 denuncias de violencias sexual contra niñas y adolescentes en las comisarías del Centro de Emergencia Mujer y CEM Regular.
En la mayoría de casos, interpusieron la denuncia son las madres de las menores, quienes ante las autoridades policiales pusieron de conocimiento el delito del que fueron víctimas sus hijas, ya que las menores también sufrieron daño físico y psicológico, que les ha dejado secuelas gravísimas en el desarrollo de la personalidad y su forma de relacionamiento que pueden persistir incluso a largo plazo.
Información preliminar detalla que, en ese periodo, la mayoría de denuncias contra menores de 17 años, se ha registrado en la comisaría CEM en Chincha con 90 registros, seguido de la comisaría CEM Ica con 70 denuncias, comisaría CEM Santiago (48), CEM regular de Salas Guadalupe (45), comisaría sectorial de Nasca (40) y en la comisaría de San Miguel, en Pisco con 37 denuncias.
Asimismo, en otras cinco sedes policiales y CEM hubo más de 20 hasta 29 denuncias en cada una, mientras que se registraron entre 1 hasta 17 denuncias de violencia sexual, contra niñas y adolescentes en otras siete comisarías de la región iqueña.
Fuente: Correo