Apurímac.- Por primera vez en casi dos años, la presidenta Dina Boluarte no recibió autorización del Congreso de la República para viajar al exterior. En la última votación del Pleno, la mandataria no logró los votos necesarios para representar al Perú en la Asamblea General de las Naciones Unidas, que se viene desarrollado entre el 21 y el 26 de septiembre.
Esto significó que las bancadas que anteriormente votaban de manera conjunta, en apoyo a la jefa de Estado, en esta ocasión se dividieran. Este fue el caso de Perú Libre y Avanza País, quienes conforman la actual Mesa Directiva. Solo Alianza para el Progreso y Fuerza Popular estuvieron a favor del viaje en bloque.
Para el historiador y profesor universitario, Jospeh Dager, “no es casual que no le hayan dado el permiso para viajar”. “Esto demostraría que las fuerzas políticas se están alejando de la mandataria para dejar de ser vistos como sus aliados”, dijo a Infobae Perú.
“Me parece que va a pasar también con Fuerza Popular, dentro de poco. Todavía no hay muy clara señal en Alianza para el Progreso (...). Mientras más se acerque el periodo electoral, apoyar a un Gobierno con nula popularidad, va a ser una carga política muy pesada para todos aquellos partidos que pretenden algún tipo de posibilidad electoral para las próximas elecciones”, añadió.
Las fechas claves para una eventual vacancia
En abril del próximo año, la mandataria tendrá que convocar a elecciones generales para el 2026, y a partir de esa fecha, el Parlamento no podrá ser disuelto.
Si deciden vacarla, el presidente del Congreso asumiría el cargo más importante del país. Esta persona podría ser Eduardo Salhuana, quien actualmente preside este poder del Estado, u otro ‘padre de la patria’, cuyo colegas crean que puede llegar a un consenso con la mayoría de grupos parlamentarios.
El ejemplo más reciente sucedió el 17 de noviembre de 2020, cuando por acuerdo de las bancadas, Francisco Sagasti fue investido como presidente de la República en reemplazo de Manuel Merino, de Acción Popular. Debido a que ya se encontraban en la última legislatura, es decir, luego del 28 de julio del 2020, el representante del Partido Morado ocupó el puesto hasta las los comicios del 2021.
La ruptura de la codependencia
Para el analista político Luis Benavente, existía un acuerdo muy visible entre Fuerza Popular y Dina Boluarte sobre el indulto a Alberto Fujimori, ya que la presidenta pudo haber acatado la orden de la Corte Interamericana de Derechos Humanos de que el exdictador vuelva a prisión, pero no lo hizo. “Hay una especie de no me tocas, no te toco. No me vacas, no te disuelvo”, resaltó en diálogo con Infobae Perú.
Sin embargo, esta alianza, donde también estarían Alianza para el Progreso (APP) y Avanza País, no durará para siempre, aclara, debido a que existe un rechazo popular muy fuerte hacia ambas instituciones. Joseph Dager también destacó que los congresistas comenzarán a mostrar una mayor oposición hacia la figura de Boluarte, teniendo en cuenta que podría convertirse en una carga para ellos.
“Se le va a ser muy difícil gobernar al Ejecutivo, los van a tener un poco en la raya, aún más dominados, pero probablemente sin llegarlos a vacar del todo, a menos que se descubra uno de esos escándalos y ya no haya forma de hacer otra cosa”, dice.
¿Qué tan probable es una vacancia a Boluarte?
En cuanto a una posible vacancia contra Dina Boluarte, Benavente recuerda que está por venir un momento en el cual ya no se va a poder disolver al Congreso, es decir, cuando se convocan a comicios del 2026. “Entonces, ese jaque no va a poder ser jaque mate, ni jaque siquiera. Ahí las cosas pueden cambiar”, manifiesta.
“Hay una regla en política electoral: nunca apoyes al que tiene poca popularidad, y nunca te enfrentes a quien tiene mucha popularidad. Por el contrario, creo que la ecuación electoral va a ser en este momento cuestionar, criticar, oponerse al régimen de Boluarte, que es muy vulnerable, tanto ella como sus ministros. Ahí sí va a terminar la luna de miel de fuerzas partidarias en el Congreso con la presidenta”, precisa.
Sin embargo, también reconoce que un acuerdo entre fuerzas políticas para asumir el Poder Ejecutivo no sería un trabajo fácil, ya que muchos partidos “no van a querer hacerle el juego Alianza para el Progreso, que de una manera muy interesante ha tenido varios presidentes del Congreso en este periodo”.
Dager se reafirma en que el beneficio de los partidos políticos actualmente es “ir cortando el poder desde el Congreso”, por lo que su apuesta será obtener el Poder Ejecutivo en las siguientes elecciones, y no en este momento.
El costo político de ostentar el poder de la Presidencia en este momento, aunque sea por un corto periodo de tiempo, “es un escenario que en ninguno de los partidos políticos que está en el Congreso lo asumiría”, afirma.
“Los asesores de la presidenta Boluarte lo saben, y por eso también la misma actitud de la presidenta, y de sus ministros, que actúan de una parte con una absoluta desconexión de la realidad (...). En el fondo sienten que los apoyen o no, no los van a vacar, porque hacerse del Gobierno en este momento sería muy complicado”, puntualizó.
Por otro lado, subrayó que el gran problema que tiene el país, que data de hace al menos 20 años, es que no existe partidos políticos realmente establecidos, ni con trayectoria.
“Cuando llegas a un puesto y sabes que no tienes representatividad, que probablemente no vas a llegar a un puesto en las elecciones siguientes, entonces vas a tratar de hacer lo que sea para lograr en ese momento lo que puedas lograr. Y eso es lo que estamos viendo en el en el país, en quizás desde hace unos 10 o 15 años, pero con mayor crudeza, quizás en los últimos cinco años”, comentó.
Fuente: Infobae