Apurímac 18/11/2024.- El alcalde Raúl Peña lejos de sentarse a conversar con el gobernador Percy Godoy para resolver las diferencias que arrastran de tiempo atrás, aprovechó la oportunidad para canalizar el descontento de una parte de la población abanquina que se opone a la decisión del Gobierno regional y el PRONIS de construir el nuevo hospital de Abancay III-I en el mismo lugar donde se halla el antiguo nocosomio regional y que aboga por la adquisición de un nuevo terreno.
El burgomaestre abanquino con el propósito de recuperar la confianza perdida, ofreció en la reunión convocada en la Casa de la Cultura el viernes último, el terreno donde se encuentra el camal municipal de aproximadamente 3.6 hectáreas, una "tripa" sin saneamiento físico y legal, situada muy cerca a un abismo, en el sector de Patibamba Baja, y con muy poca posibilidad de cumplir con los requerimientos técnicos para levantarse en ese lugar un centro hospitalario de complejidad.
Peña no dudó en sacarle punta al excesivo protagonismo del gobernador Godoy en la gestión del nuevo hospital y por no haber transmitido a la población que ese trabajo es de entera responsabilidad del Gobierno Nacional a través del Ministerio de Salud y su ente técnico, el PRONIS, error político que ahora le pasa la factura y que tiende a agudizarse de no haber señales de diálogo entre ambas autoridades en el más breve plazo.
Asimismo, la salida política de corto plazo planteada por Raúl Peña podría atizar la confrontación social entre abanquinos toda vez que hay varios sectores que respaldan la propuesta del Gobierno regional, como el Sindicato de Trabajadores de Construcción Civil y colgándose del saco, el alcalde de Tamburco, Raúl Silva, por la construcción del hospital de contingencia en el sector de Maucacalle, en su jurisdicción.
Pero hay otro factor más que podría conllevar inevitablemente a la confrontación, la respuesta que brinde el PRONIS los próximos días sobre la inviabilidad técnica del terreno del camal, manteniéndose la propuesta inicial de construcción en el mismo lugar y desechándose la posibilidad de adquirir un nuevo terreno que albergue al futuro hospital III-I.
¿Y DÓNDE SE CONSTRUIRÁ EL NUEVO CAMAL?
Nada serio. Todo apunta que la donación ofrecida por Peña Sánchez ha sido solo para el aplauso y ponerse en mejor posición ante Godoy, porque él mismo, sus gerentes y subgerentes no tienen ni la remota idea el lugar dónde se levantará el nuevo camal municipal, ni siquiera forma parte de la lista de proyectos de inversión que quieren poner en marcha el 2025 y mucho menos el 2026, "puro floro" como se diría criollamente.
Y esta aseveración quedó corroborada en la reciente conferencia de prensa realizada el viernes 15 de noviembre en el Colegio de Ingenieros de Apurímac (horas después de la mecida convocada en la Casa de la Cultura) donde participaron funcionarios de la Municipalidad Provincial de Abancay. Ahí anunciaron que contaban con un exiguo presupuesto para 5 proyectos: el Mirador, mejoramiento de la plaza de armas, la autovía San Gabriel - Illanya, pavimentación de la avenida Panamá y construcción de pistas y veredas en Pachachaca.
Durante la exposición de los funcionarios que tardó 1 hora con 20 minutos aproximadamente no aparece una sola línea, ni mención, ni idea de proyecto, sobre la construcción del nuevo camal municipal como corresponde a la capital regional, en otras palabras, el alcalde Peña optó por ceder una propiedad municipal sin contar con una debida contingencia, es decir, sin previsión ni planificación, o sea, a lo que venga. (P.P.D)