Carlos Enrique Guisado Huillca, fue sentenciado a cadena perpetua y al pago de una reparación civil de 20 mil soles, tras haberse comprobado que abusó de su hijastra en más de 10 oportunidades, cuando la menor tenía entre 7 y 10 años.

En audiencia de apelación la magistrada de la Primera Fiscalía Superior Penal de Abancay, Yanet Guerrero Adrianzén, reiteró la responsabilidad penal del sentenciado, logrando que se confirme la pena máxima contra el sujeto quien aprovechó su condición de padrastro para abusarla.

El hecho fue denunciado por la tía de la menor, quien se enteró del ilícito penal cuando la agraviada se encontraba de vacaciones en la ciudad del Cusco, fue entonces que contó del abuso al que era sometida.

Este y otros argumentos permitieron que el sentenciado sea internado en el penal de San Idelfonso de Abancay, lugar donde purgará la pena de cadena perpetua.