¿Se lava las manos? El gobernador Baltazar Lantarón ya no culminará el hospital de Andahuaylas para julio del 2020 como anunció semanas atrás en RPP durante una entrevista ofrecida, ahora resulta que “le pasó la pelota” al presidente Martín Vizcarra quien manifestó que el nosocomio chanka estará terminado en los próximos dos años.

Así se desprende de una nota de prensa publicada en el portal del Gobierno Regional de Apurímac, que recoge las declaraciones del primer mandatario del país durante un encuentro que sostuvo con el gobernador regional, en Lima.

¿Y el informe? A pocas horas de acabar octubre, el gerente general Raúl Gutiérrez tampoco presenta el informe técnico final del corte de obra como anunció en reiteradas oportunidades en Andahuaylas y Abancay.

Gutiérrez afirmó que una vez presentado el informe técnico de inmediato era aprobado por el Consejo Regional para declararse la emergencia y convocar a licitación del expediente técnico de lo faltante, según sus propias declaraciones.

Sin embargo, en las últimas semanas estos anuncios han dado varios giros, evidenciándose que la gestión de Baltazar Lantarón no tiene una estrategia definida para resolver el problema del hospital, solo son improvisaciones que va recogiendo del camino, como lo dicho en Pacucha, que debía construirse infraestructura adicional porque la existente era obsoleta del 2008.

A esto se suma, un nuevo globo de ensayo lanzado por el gobernador que extrañamente fue retirado del portal institucional donde propone que la culminación de la construcción del saldo de obra y equipamiento del hospital de Andahuaylas se ejecute en la modalidad de Gobierno a Gobierno.

“Baltazar Lantarón fue enfático en manifestar que la construcción del hospital de Andahuaylas será ejecutada en la modalidad de gobierno a gobierno para asegurar que se culmine la obra y por el fracaso de llave en mano que trajo una serie de consecuencias negativas para la población”, precisa la nota antes de ser retirada del portal oficial.

Mientras tanto, continúan las mecidas y la improvisación en torno al paralizado hospital andahuaylino.