Cientos de ciudadanos se movilizaron por las principales calles de la ciudad para exigir que Oscorima honre sus compromisos.
La huelga convocada por los principales sindicatos afecta el funcionamiento del transporte, la educación y otros servicios públicos, mientras el gobierno despliega miles de policías para evitar desmanes.
Las diferencias entre los mandatarios se profundizaron tras la condena a Jair Bolsonaro por intento de golpe de Estado. El Congreso brasileño debate una posible amnistía para el exmandatario.