(Jueves 19/01/2023).- En Andahuaylas a 15 días del reinicio de la huelga indefinida los establecimientos comerciales se encuentran cerrados desde restaurantes, galerías comerciales, mercadillos, el mercado central así como los terminales terrestres del todo el valle del Chumbao.

Nadie puede vender, ni abrir la puerta de sus negocios de miedo a los piquetes que siguen activos con la llegada de más comuneros de diferentes comunidades campesinas. Los dirigentes estratégicamente han hecho un cronograma para que bajen hombres y mujeres y a todo esto se suman vecinos de barrios urbano marginales de la ciudad.

Han viajado varios cientos de personas a la denominada “Toma de Lima o los Cuatro Suyos” encabezados por su dirigente Eugenio Allcca.

Las marchas en Andahuaylas siguen igual, sorpresivamente comuneros de Piscobamba del distrito de Ocobamba de la provincia de Chincheros llegaron el día martes 17 de enero para realizar su marcha desde Santa Rosa – Chihuanpata - Talavera.

Los manifestantes llegan muy cansados de hambre y de sed, felizmente les esperaba ollas comunes que preparan grupos de voluntarios en el campo ferial.

Debido al paro y la presión de los manifestantes, la desesperación cunde entre los comerciantes y pequeños empresarios del valle porque se les viene el pago de las deudas que tienen con los bancos, pago de alquileres de locales, pago de servicios y otros. Nadie puede levantar la voz o salir a cuestionarlos porque están sometidos a la paralización.

A esta situación se suma la gran cantidad de vehículos que siguen varados en la vía Ayacucho – Andahuaylas más de 15 días. Algunos dueños de camiones se comunicaron con los periodistas de radio Titanka pidiendo que imtercedan para que los dejen pasar. Los comunicadores cumplieron su misión, pero recibieron opiniones desfavorables de los manifestantes. 

Ya se nota escasez de productos de primera necesidad como arroz, azúcar, fideos, los mismos que han subido de precios, como sucede con el balón de gas que de S/ 57.00  subió más de S/ 60.00 

Lamentablemente pese a esta critica situación que sigue agudizándose, las autoridades se aferran al cargo, la presidenta Dina Boluarte no quiere renunciar, el Congreso se hace de los oídos sordos pese que cerca de 50 personas murieron reclamando sus justas reivindicaciones en las regiones de Puno, Cusco, Arequipa, Apurímac, Ayacucho y otros. (Por: Guy Arias Velasque)