528 habitantes de los poblados de Llactabamba, Soccoro y Chihuarqui, en Apurímac, se encuentran en peligro sanitario ante las constantes nubes de polvo que se originan por los deslizamientos registrados en la ladera del cerro Chamanayoc desde el pasado 27 de julio.   

La más afectada por su proximidad a la zona de los derrumbes es Llactabamba cuyos 327 habitantes se resisten a ser reubicados a un reasentamiento temporal, según se informó.

Cabe precisar que en Llactabamba las densas nubes de polvo se concentran en mayor medida debido a que se encuentra en una quebrada protegida por el imponente macizo del Chamanayoc que dificultan su desplazamiento a pesar de los fuertes vientos que se dirigen hacía la ciudad de Abancay.

Para el director regional de Defensa Civil, Julio Dueñas Durand, hablar de una reubicación implicaría un mayor costo en recursos y logística, pero, además manifestó que los pobladores se niegan a moverse del lugar pese a la emergencia.

“El sector Salud está monitoreando constantemente estos poblados y una vez que tengamos los resultados de los estudios realizados por los especialistas del Ingemmet se tomarán decisiones al respecto”, señaló.

De otro lado, brigadas del sector Salud repartieron mascarillas N95 a pobladores de Moyocorral, Ccarccatera, Ccacssa, Ccoya y otros pequeños poblados ubicados en Abancay, como parte de las acciones prevención previstas por la declaratoria de emergencia.

Durante el recorrido efectuado a la zona, se observaba a la distancia las grandes nubes de polvo que se levantan por acción de los vientos procedentes del Vraem, “de todas maneras tiene que plantearse la reubicación de estos poblados porque está en juego la salud de niños y adultos”, comentaron los funcionarios.