(Miércoles 7/12/2022).- Según el registro de atención del Centro de Emergencia de la Mujer Ayacucho (CEM), de enero a julio del 2022 se reportó 2330 casos de violencia contra la mujer, que representa un 91.3%.

Para este año, se tuvo una leve reducción de casos en comparación con 2021, donde se reportó 4924 casos, siendo las provincias de mayor incidencia Huamanga con 1032 casos, Huanta 535 casos y Lucanas 101 casos.

Al respecto, la presidenta del Instituto Regional de la Mujer Ayacuchana (IRMA), Edith Villareal, refirió que diario se registran 13 casos atendidos, lo que refleja que la violencia contra la mujer no ha tenido un descenso significativo.

“Es una situación sumamente preocupante que está reflejando que la intervención intersectorial e interinstitucional no está resultando óptimo para el tratamiento de los casos violencia contra la mujer y el grupo familiar”, indicó.

 Con respecto, a los grupos hectáreas se reportó que de 0-17 años se tiene 241 casos, 18 a 59 años 741 casos y 60 a más 50 casos.

La violencia en todas sus expresiones se evidencia en violencia física 41.9%, psicológica 40.3%, sexual 16.8% y económica 1%.

 “Estas cifras nos evidencia que la violencia contra las mujeres e integrantes del grupo familiar, una débil implementación de acciones para prevención y deficiente articulación con los operadores de justicia”, acotó.

  Mientras que tentativas de feminicidio se han presentado 4 casos a nivel regional (Cangallo, Vilcas Huamán, Huamanga y Huanta) que se encuentran en proceso de investigación.

 “Hay muchos casos que están en detención preventiva y que están llegando al límite del tiempo y que en muchos casos están saliendo los agresores sin la sanción correspondiente. El Estado no brinda oportunamente la atención y sanción”, refirió.

La presidenta del IRMA, también observó que las cifras no coinciden con la información proporcionada por la Policía Nacional del Perú y el Ministerio Público quienes reportar 2184 y 3307 casos respectivamente.

Desde el IRMA, se recomendó la necesidad de contextualizar las normas técnicas y protocolos considerando la diversidad cultural de la región, que se ha venido dialogando en algunos espacios e instancias; reforzar y dinamizar los procesos de coordinación y articulación con los operadores de justicia para mejorar los mecanismos de prevención y atención a víctimas de las violencias contra las mujeres y miembros integrantes de la familia.

Además, de la necesidad de actualizar la data de casos judicializados para el seguimiento de las denuncias (investigación, denuncias y judicializados) para evitar que agresores salgan libre, la necesidad de fortalecer las capacidades y actualización permanente del personal que labora en las entidades con el fin de brindar atención eficiente y oportuna.

 Los operadores de justicia deben atender con celeridad la denuncias, sensibilizar a las víctimas sobre el proceso de atención, el derecho de protección.

Para el día de hoy, se ha convocado a una marcha de sensibilización por las principales calles de la ciudad, a partir de las 3 de la tarde, con participación de víctimas y familiares.

Fuente: Jornada