(Lunes 18/10/2021).- Tras el escándalo de los “chats” de la Diresa Apurímac difundidos por las redes sociales, se conoció que la Oficina de Control Institucional (OCI) de esta institución había requerido información de las compras directas realizadas por funcionarios y personal de confianza que colocó el gerente de Desarrollo Social, Julio César Rosario González.
El oficio N° 006-2021-CGR-GRCAP-OCI/DIRESA con fecha 20 de setiembre 2021 dirigido a la entonces directora Janet Lizárraga Valer y firmado por el jefe de ese órgano de control Rubén Valenzuela Sotomayor pedía información sobre tres jugosas adquisiciones realizadas en plena pandemia de la Covid-19 y el nombre de los funcionarios involucrados en estos procesos. Estas fueron:
- Expediente de contratación directa N° 012-2021-DIRESA-APU: Adquisición de compras de balones de oxígeno de 10m3 para los establecimientos de Salud en las diferentes redes de la Región Apurímac.
- Expediente de contratación directa N° 009-2021-DIRESA-APU: Adquisición de servicio de transporte y distribución de productos farmacéuticos, dispositivos médicos y productores sanitarios para los diferentes establecimientos de la Diresa Apurímac.
- Expediente de contratación subasta inversa electrónica N° 01-2021-DIRESA-APU: Adquisición de guantes quirúrgicos de diferentes medidas y jeringas para los establecimientos de salud.
- Por intermedio de la Oficina de Patrimonio indique qué servidores y/o funcionarios se les asignó el PC con código patrimonial N° 740899500256 en el periodo 2021.
Las movidas
El 5 de octubre, fecha que coincidió con las celebraciones por el Día de la Medicina, la defenestrada directora, Janet Lizárraga, en declaraciones prestadas a varios medios locales, manifestó que el OCI Diresa investigaba el origen del chat “Ing. David” que presuntamente involucraba a varios funcionarios de la entidad en el pago y distribución de coimas por las adquisiciones realizadas.
No era casualidad que varios de los nombres que aparecían en el intercambio de mensajes del chat “Ing. David” coincidían con funcionarios a cargo de las áreas de administración y logística, todos ellos del círculo de confianza de Julio César Rosario González y designados por él cuando fue director de la Diresa.
Así tenemos al “Ing. David” (sería David Távara, actual director de Infraestructura de la Diresa); “Godo” (sería Godofredo Campos Peláez, administrador); “Daniel” (sería Daniel Moisés Franco Flores, director Logística) y “Julio” (sería Julio César Rosario González, exdirector Diresa y actual gerente de Desarrollo Social del GORE Apurímac), entre otros nombres más.
Días después de estas declaraciones y tras conocerse que varios de los arriba citados fueron separados de la institución por “improductivos”, apareció el segundo chat “Directora Janet”, donde se mostraba que Janet Lizárraga y la secretaria general del Sitasa, Epifanía Barazorda, estarían involucradas en presuntos arreglos económicos con el responsable del OCI Diresa, Rubén Valenzuela (sería Rubencito”), el mismo servidor que le pisaba los talones al grupo de funcionarios inmersos en las adquisiciones irregulares.
Tras lo sucedido y sin brindar declaraciones públicas hasta hoy, el gobernador Baltazar Lantarón firmó la Resolución Ejecutiva Regional N° 400-2021-GR.APURIMAC/GR. agradeciéndole a Janet Lizárraga por los servicios prestados y designando en su reemplazo al médico Renán Ramos Morón.
Las diligencias se encuentran en curso para el inicio de la investigación preliminar por parte de la Fiscalía Anticorrupción de Abancay y determine el origen de estos dos chats que comprometen en presuntos actos de corrupción a servidores vinculados a la gestión de Baltazar Lantarón. (Por: Paul Pilco Dorregaray)
